Cuando se fijó observó a Babaji lavando los pies y los utensilios del anacoreta. La sonrisa de Babaji le hizo entender la lección de humildad y que no debía criticar a nadie sino ver siempre al Señor residiendo por igual en el templo del cuerpo de todos los hombres , https://bagh8com70369.nizarblog.com/35575966/indicators-on-bagh8-affiliate-you-should-know